Su
nombre procede de las palabras liebre (en inglés jackrabbit) y antílope
(antelope). Y eso es precisamente lo que es: un cruce entre una liebre y un antílope
(o ciervo). A veces se le representa, también, con cola de faisán.
Cuentan
que el primer avistamiento de esta criatura se produjo a principios del siglo
XIX. Un pionero, John Colter, afirmó haber visto uno. No se le tomó muy en
serio, y eso que al parecer hasta le puso nombre...
En
1909 la criatura aparece citada (y dibujada) en el libro de Ernest T. Seton
"Life Histories of Northern Game Animals". El autor defendió la
autenticidad de la criatura, afirmando que había logrado ver uno que conservaba
un conocido de Chicago.
En
1932 dos hermanos, Douglas y Ralph Herrick, de Douglas (Wyoming) vendieron uno
disecado... por diez dólares. Según su propia confesión, lo disecaron ellos
mismos, y era una liebre campestre... con unos cuernos artificiales añadidos.
Aunque nunca afirmaron que sus jackalopes fueran auténticos, la cosa se
convirtió en una especie de moda, y empezaron a lloverles los pedidos. Los dos
hermanos (y más tarde el hijo de Ralph) hicieron del montaje y venta de
jackalopes disecados su medio de vida, y se calcula que crearon decenas de
miles a lo largo de su vida. El mismísimo presidente de los Estados Unidos,
Ronald Reagan, tenía la cabeza disecada de uno, que afirmaba haber cazado él
mismo (mentira podrida, por cierto, se la regaló en 1986 un senador de Dakota).
El
nombre Jackalote es marca registrada por las autoridades de Wyoming desde 1965.
Veinte años más tarde, en 1985, se nombró a la ciudad de Douglas "la
ciudad del jackalope". Se hizo una estatua en su honor y cada año se
celebra la fiesta del jackalote. Es especie protegida, pero se venden licencias
de caza válidas para un único día... el 31 de Junio , desde la medianoche hasta
las 2 de la mañana. (Junio tiene solo 30 días, por cierto)
Durante
un tiempo se puso de moda en los bares del medio oeste tener una cabeza
disecada de jackalote, y sólo eso explica (que sea bicho de bares) las leyendas
que han surgido en torno suyo:
Se
dice que ess un animal muy tímido, por eso es difícil cazarlo (y aún verlo). Por
suerte, tiene un defecto: le encanta el whisky. La mejor manera de cazarle es
dejar una botella de licor al raso. El bicho bebe hasta hartarse y claro, coge
una enorme borrachera.
Con
todo, un jackalope puede imitar cualquier sonido, incluida la voz humana. Así
que, aún aturdido por el alcohol, aún puede despistar a sus perseguidores
(sobre todo si tratan de cazarle a oscuras, de noche) usando frases como
"¡Se fue por aquí! ¡En aquella dirección!".
También
se dice que la leche de las hembras es un eficaz medicamento contra muchos
males, y aunque no se las puede mantener en cautividad (pues mueren) se pueden
ordeñar ya que acostumbran a dormir panza arriba.
Personas poco crédulas como me imagino que son, supongo que a estas alturas deben creer que el mito del jackalote es eso, un mito...
Y
sin embargo... Encontramos referencias a liebres y conejos con cuernos en otros
lugares del globo: por ejemplo, el Wolpertinguer de Bavaria, o el Rasselbock de
Turingia (ambas en Alemania). Incluso alguien tan de fiar como Durero dibujó un
conejo con cuernos nada menos que en 1502.
Y
es que... Pásmense ustedes, pero el jackalope es real.
Bueno,
más o menos.
El
origen de la criatura se debe al virus "shope papilloma", que provoca
en conejos y liebres el crecimiento en la cabeza de unos tumores óseos muy
parecidos a cuernos.
Pero
que la verdad no les corte, durante su próximo viaje por el medio oeste, a la
hora de adquirir una "auténtica" cabeza disecada de jackalope en una
tienda de souvenirs...
Sale un "conejílope" en el corto de Pixar llamado "saltando" (boundin').
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